Estimado Fernando,
Contrario a fenómenos mediáticos y poco seguidor de las categorías inferiores confieso que al principio no creí en ti.
En 2001 vivía en Montreal cuando todos los atléticos con los que hablaba en Madrid me decían que había un fenómeno que jugaba en los equipos inferiores y que iba a ser nuestro jefe. Sumidos en la mediocridad a la que nos habían llevado los usurpadores, pensé que se ilusionaban con cualquier cosa, confieso que no les creí.
Recuerdo que iba en un autobús cuando, hablé con un amigo y me dijo que en Albacete habías marcado un gol, ya me dijo Edu que eras lo único que merecía la pena en este club, confieso que aun tenia esperanzas en algo más y tampoco le creí.
También tengo en la memoria mí peor día como atlético, en Getafe ví hombres como castillos llorar como en el funeral de sus madres y entre lloros infantiles un hombre dijo “dejamos al Niño y subimos 10 del filial y en primera en un año”, a punto de tirar la toalla, confieso que una vez mas no creí.
Al año siguiente tu y Zapatones nos subisteis a primera, casi parecíamos de nuevo nosotros, gente de barrio aunque fuera en segunda pero bastaba mirar a la mole inmunda del palco para volver a la penosa realidad, confieso que no me gustó verte en Neptuno, tu no eres jugador para celebrar ascensos, pero eras joven y quise entenderte. Aquel verano los de siempre no trajeron mas que morralla pero otro amigo me dijo “Torres el año que viene va explotar y se va a salir”, para no variar no le creí.
En efecto, explotaste, vi como te enfrentabas al mundo defendiendo al oso, al madroño, al Calderon (estadio), a Calderon (nuestro presidente), a las rayas rojas y a las blancas, a los socios de antaño e incluso a los botarates que tenemos ahora en las gradas. Tu, sólo tu. Con honrosas excepciones no te dieron ni un vulgar escudero, ni un tío que sintiera la camiseta, ni siquiera un buen mercenario…solo has sostenido a un equipo durante 5 temporadas funestas. Si alguna vez hemos estado cerca de hacer algo ha sido gracias tí. Verano tras verano los que no soportan que alguien juegue bien y quiera a su equipo y éste no se llame Barça o Madrid decidían tu futuro sin ti, esta vez tuve razón y no les creí.
En octubre del 2005, Fui a Bruselas, solo para verte a ti. Detrás de mi Iturgaiz y su familia no tuvieron otro objetivo que insultarte y poner en duda tu valía. Durante 60 minutos mi lengua se iba a partir para no explotar. Después, tu me distes motivos para darme la vuelta y sin palabras dejar sentado quien eras tu. Aun a pesar de tu esfuerzo, he tenido que morderme la lengua cien veces oyendo como la mugre humana que puebla la grada del Calderon actual te despreciaba y no se acercaban a comprender lo que has hecho por nosotros. Todo el mundo pensaba que al final los ibas a convencer, sabiendo lo que ya nos habías dado, no les creí.
Durante 5 años solo te hemos tenido a ti dentro del campo, y solo te hemos tenidos a ti fuera del campo. Hace unas semanas dijiste algo que te honra y de paso en una sola frase señalaste la mierda en la que nos ahogamos “No es normal que yo fuera capitán del Atlético de Madrid con 19 años”, los mentirosos habituales interpretaron tus palabras a su manera, siempre a favor del viento y del dinero que les llega cada mes de la mugre humana. Habituado a ellos no les creí
Por ti corro el riesgo de parecer una quinceañera histérica ante su ídolo quincenal, no me importa un carajo porque confieso que lo unico que me interesa ahora del fútbol es que a ti te vaya bien. En ti si creo.
Ayer dudaba sobre renova o no mi abono, hoy lo tengo claro. GIL y CEREZO nos vemos el año que viene en la grada, mugre humana.
Suerte capitán,........You'll never walk alone.
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