martes, junio 19, 2007

Hundidos en la miseria

20 años ya de dictadura Gilista, 15 desde el secuestro sin poner un duro, 10 sin ganar un título, 10 temporadas por debajo del 6 puesto y sin visitar Europa, 2 años en segunda, más de 1000 jugadores y 60 entrenadores, la afición mas exigente de España convertida en la más patética, del 3er equipo de España y un grande de Europa al “equipo de los perdedores” y la “mística del tonto” y un desconocido en Europa, del equipo coraje al equipo más fácil del planeta para vivir como tuercebotas, no sigo porque me echo a llorar……y sin poderle ver fin a este suplicio. Yo lo único que espero es la desaparición, la liquidación y la refundación. Empezar en regional e intentar rememorar lo que era ser atlético hace algunos años.

Hay algunos que tienen más esperanzas y que han convocado una manifestación el día 26, vigésimo aniversario del infausto día en que la ballena-padre Gil empezó a destrozar un equipo legendario que desapareció ese día….

Si estuviera en Madrid, allí estaría aun a pesar de mi desesperanza y animo a todos los atléticos a hacerlo. Es mejor llevar el sufrimiento con algunos más para darse ánimos.

Ojala que Neptuno sea un clamor contra los chorizos delincuentes que controlan sus ganancias a través del Atlético de Madrid…pero me temo que solo unos centenares se acercarán a la fuente del Dios del mar para darle un simbólico entierro a un difunto de 20 años y que volveremos a ver en que ha quedado esta afición: neo-atléticos de a 15000 pesetas el abono, Manoletes y Abellanes y regocijo en la derrota.

De fútbol no hablo, eso es lo de menos en un club donde no hay centímetro sin corrosión. Todo lo que tenga que ver con el deporte no existe en este club, todo esta podrido. Solo nos queda esperar a la desaparición….y preparase para empezar de cero de nuevo

Hago una excepción con Fernando Torres. Fernando es lo único que nos queda que se parece al atlético de antes de la peste gilista y espero por su bien que le queden pocos días en el equipo. No podemos permitir que esta familia multidelincuente y sus cómplices engullan a un jugador genial. El primero que se comprará la camiseta del club extranjero al que vaya con su número será un servidor que pasara en ese momento a ser un seguidor de jugador y no de club (al parecer los japoneses y coreanos ya lo hacen así).

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